Los daños estructurales causados por la humedad son una preocupación para los propietarios de viviendas y para los administradores de edificios, ya que pueden causar problemas graves en un edificio. La presencia de humedad puede comprometer seriamente la integridad de las estructuras, afectar la calidad del aire interior y poner en peligro la salud de los ocupantes.
Normalmente, este tipo de humedades ocurren debido a la ascensión capilar y a las filtraciones causadas por la acumulación de agua en el suelo. Si no se abordan a tiempo, pueden llegar a dañar los cimientos de la casa o el edificio provocando grietas en los muros y fachadas, además de permitir la entrada de agua a la estructura y poder comprometer elementos estructurales como pilares, muros y vigas del edificio.
Por ello, es esencial comprender las causas de estos daños, cómo detectarlos a tiempo y las mejores soluciones para abordarlos.